¿Por qué las galletas quedan crujientes al sacarlas del horno?

Cuando las galletas se hornean, el agua de su interior se convierte en vapor. Este vapor crea una presión dentro de las galletas, lo que hace que se hinchen y se vuelvan livianas. Cuando las galletas se sacan del horno, el vapor de su interior se condensa nuevamente en agua. Esta agua hace que las galletas se encojan y queden crujientes.

Aquí hay algunos factores adicionales que pueden afectar el crujiente de las galletas:

* El tipo de harina utilizada. Las galletas hechas con harina para todo uso quedarán más crujientes que las galletas hechas con harina para pan o harina para pasteles.

* La cantidad de levadura en polvo utilizada. Las galletas hechas con más levadura en polvo quedarán más crujientes que las galletas hechas con menos levadura en polvo.

* La temperatura del horno. Las galletas horneadas a una temperatura más alta quedarán más crujientes que las galletas horneadas a una temperatura más baja.

* El tiempo que se hornean las galletas. Las galletas horneadas durante un período de tiempo más largo quedarán más crujientes que las galletas horneadas durante un período de tiempo más corto.

Controlando estos factores, puedes crear galletas que sean exactamente como a ti te gustan.