¿Se congela el ajo con o sin piel?

Generalmente es mejor congelar el ajo con piel. He aquí por qué:

1. Conservación del Sabor: La piel del ajo actúa como una barrera natural, ayudando a conservar su sabor y aroma durante el proceso de congelación. Dejar la piel puede evitar que el ajo pierda intensidad y quede blando.

2. Oxidación Reducida: El ajo es propenso a la oxidación, lo que puede hacer que se ponga marrón y pierda su sabor. Mantener la piel ayuda a ralentizar este proceso de oxidación, permitiendo que el ajo conserve su color, frescura y sabor durante más tiempo.

3. Manejo más fácil: El ajo congelado con piel es más fácil de manipular y utilizar. La piel proporciona una capa protectora, lo que hace que sea menos probable que se pegue o se aplaste cuando se congela. Cuando estés listo para usarlo, simplemente quítale la piel antes de usar el ajo.

4. No es necesario blanquear: El escaldado es un proceso de hervir o cocinar al vapor brevemente las verduras antes de congelarlas para ayudar a preservar su textura y color. Sin embargo, no es necesario blanquear el ajo. Dejar la piel logra efectivamente un objetivo similar al proteger la textura del ajo durante el proceso de congelación.

En general, es más ventajoso congelar el ajo con piel. Este método conserva su sabor, reduce la oxidación, facilita la manipulación y el pelado y elimina la necesidad de escaldar.