¿Qué pasa si pones una lata de refresco en la estufa?

Si colocas una lata de refresco de aluminio sellada en una estufa y la calientas, podría suceder lo siguiente:

1. Acumulación de presión: A medida que la lata se calienta, el refresco líquido del interior se expande, provocando un aumento de presión.

2. Lanzamiento emergente: La lata está diseñada para soportar una cierta cantidad de presión. Si la presión excede este límite, la tapa emergente (pestaña de lata) se levantará o se abrirá, liberando parte del exceso de gas y líquido. Esto puede crear un silbido o estallido repentino y es posible que salga gaseosa.

3. Puede abultarse: Si la presión continúa aumentando y excede un umbral más alto, la lata puede comenzar a abultarse o deformarse debido a la inmensa fuerza interna.

4. Ruptura y Explosión: En casos extremos, la lata puede llegar a un punto en el que ya no pueda soportar la presión interna. Esto podría provocar una ruptura o explosión catastrófica, provocando que la lata estalle violentamente. Los fragmentos de refresco y lata podrían salir expulsados ​​con una fuerza considerable, lo que supone un peligro para la seguridad.

5. Fuego: Dependiendo del tipo de estufa y los materiales circundantes, existe un ligero riesgo de que el contenido de azúcar del refresco se caramelice y se incendie si la estufa se deja a fuego alto durante mucho tiempo.

Precauciones de seguridad:

- Nunca caliente intencionalmente latas selladas de refrescos u otras bebidas en una estufa.

-Las latas de refrescos están diseñadas para contener líquidos a presión normal y temperatura ambiente. Calentarlos en una estufa puede tener consecuencias inesperadas y peligrosas.

- Si desea calentar una bebida de forma segura, lo mejor es verter el contenido en un recipiente resistente al calor destinado a cocinar y utilizar la estufa con un control de temperatura adecuado.