¿Las semillas, los frutos y otros aditivos estaban reservados para los ricos?

Sí, en muchas culturas antiguas, las especias, semillas, frutas y otros aditivos alimentarios a menudo se consideraban lujosos y estaban reservados principalmente para las clases ricas y altas. Estos artículos a menudo se importaban de tierras lejanas y requerían extensas redes comerciales, lo que los hacía costosos y exclusivos. Especias como la pimienta, el clavo y la canela eran especialmente apreciadas por sus distintos sabores y propiedades medicinales, y se utilizaban para realzar el sabor de los alimentos y conservarlos. Las frutas como los dátiles, los higos y los cítricos también se consideraban delicias y se utilizaban a menudo en postres y otras delicias especiales. Los ricos podían añadir estos condimentos especiales a su comida con regularidad, mientras que las personas con un presupuesto más ajustado los comían ocasionalmente, a menos que hubiera una dolencia.