¿Cómo se sabe si los tomates enlatados están malos?

Hay algunas formas de saber si los tomates enlatados son malos:

1. Mira la lata. Si la lata está abultada, tiene fugas o tiene signos de daño, debe desecharse.

2. Huela los tomates. Si los tomates tienen un olor agrio o desagradable, deben desecharse.

3. Prueba una pequeña cantidad de tomates. Si los tomates tienen un sabor amargo, ácido o metálico, deben desecharse.

4. Comprueba la fecha de vencimiento. Si los tomates han pasado su fecha de caducidad, deben desecharse.

Es importante tener en cuenta que los tomates enlatados aún pueden ser seguros para comer incluso si tienen algunos signos leves de deterioro, como un olor o sabor ligeramente desagradable. Sin embargo, siempre es mejor pecar de cauteloso y desechar los tomates que muestren signos de deterioro.