¿Cómo se reproduce la mandarina?

1. Semillas:

Las mandarinas, al igual que otras frutas cítricas, normalmente se reproducen a través de semillas. Cuando se consume una mandarina y se tragan las semillas, estas pueden pasar por el sistema digestivo y permanecer viables para la germinación. Estas semillas se pueden plantar en el suelo y, con el cuidado adecuado, se convertirán en nuevos árboles de mandarina.

2. Propagación Vegetativa:

Las mandarinas también pueden reproducirse vegetativamente, lo que implica cultivar nuevas plantas a partir de partes de plantas existentes. Los productores comerciales suelen preferir este método, ya que permite la propagación de rasgos deseables y garantiza la uniformidad genética. Existen varias técnicas de propagación vegetativa utilizadas para las mandarinas:

a. Esquejes: Los esquejes de tallo se toman de árboles de mandarina maduros y se plantan en un medio de enraizamiento adecuado. En condiciones favorables, estos esquejes desarrollarán raíces y se convertirán en nuevas plantas.

b. Capas de aire: Esta técnica implica herir una rama mientras aún está unida al árbol padre y cubrir el área herida con un medio de enraizamiento húmedo. Una vez que se desarrollan las raíces, la nueva planta se puede cortar y cultivar de forma independiente.

c. Injerto: Este método implica unir el tallo de un cultivar de mandarina (vástago) al patrón de una especie de cítricos relacionada. El injerto permite combinar las características deseables del vástago con la resistencia a enfermedades del patrón u otros rasgos ventajosos.

3. Cultivo de tejidos:

Las mandarinas también se pueden propagar mediante cultivo de tejidos, una técnica de laboratorio que implica el cultivo de células o tejidos vegetales en un ambiente controlado. Este método permite la rápida propagación de plantas libres de enfermedades y la preservación de material genético valioso.

Vale la pena señalar que el éxito de la reproducción de la mandarina depende de varios factores, como las condiciones ambientales, las prácticas de cultivo adecuadas y el cultivar específico que se propaga.