¿Cuál es el momento adecuado para servir el postre?

El postre normalmente se sirve al final de la comida, después del plato principal y las guarniciones que lo acompañen. Tradicionalmente se sirve como plato final, lo que permite a los comensales terminar la comida con una nota dulce. En cenas formales, el postre se puede servir con té o café, añadiendo un toque extra de indulgencia y satisfacción a la comida.