¿Por qué se te antoja comer posos de café?

Por lo general, las personas no anhelan ni comen posos de café. Los posos de café están compuestos por los restos gastados de los granos de café después del proceso de elaboración. Tienen una textura amarga y abrasiva debido a la presencia de celulosa y otras fibras vegetales no digeribles, lo que las hace no aptas para el consumo humano.