Cuando la vida te da limón, ¿haces limonada?

Cuando la vida te dé limones, haz limonada.

Este proverbio anima a las personas a sacar lo mejor de las situaciones difíciles. Sugiere que en lugar de centrarse en los aspectos negativos de una situación, las personas deberían tratar de encontrar formas de convertirlos en algo positivo. La metáfora de convertir limones agrios en limonada dulce representa la idea de transformar la adversidad en oportunidad y encontrar creatividad y resiliencia en circunstancias desafiantes.