¿Se echan a perder los refrescos si se calientan?

Los refrescos no se echan a perder en el sentido de que no sean seguros para beber, pero su sabor y calidad pueden verse afectados por las altas temperaturas. Cuando el refresco se calienta, el gas dióxido de carbono puede expandirse y hacer que el refresco se aplane. El calor también puede hacer que los sabores del refresco se descompongan, haciendo que el refresco tenga un sabor menos refrescante. Además, el alto contenido de azúcar en los refrescos puede hacer que se vuelvan más ácidos cuando se calientan, lo que puede afectar su sabor y sabor.

Para mantener el mejor sabor y calidad del refresco, se recomienda almacenarlo en un lugar fresco y seco y evitar exponerlo a altas temperaturas. Si el refresco se calienta, aún es seguro beberlo, pero es posible que no sepa tan bien como si se hubiera mantenido frío.