¿Puede un niño de ocho años beber una energía monstruosa?

No . Las bebidas energéticas no son aptas para niños. Contienen altas cantidades de cafeína, azúcar y otros ingredientes que pueden ser perjudiciales para la salud de los niños. La cafeína es un estimulante que puede provocar ansiedad, nerviosismo e insomnio en los niños. El azúcar puede contribuir al aumento de peso y a las caries. Otros ingredientes, como la taurina y el guaraná, pueden tener efectos negativos en la salud de los niños.

La Academia Estadounidense de Pediatría (AAP) recomienda que los niños menores de 18 años eviten el consumo de bebidas energéticas. La AAP también recomienda que los niños limiten su consumo de cafeína a 100 miligramos por día.

Las bebidas energéticas no sólo son malas para la salud de los niños, sino que también se comercializan de forma que resulten atractivas para los niños. Los colores brillantes, los lemas pegadizos y las afirmaciones de un mejor rendimiento pueden resultar atractivos para los niños. Sin embargo, los padres deben ser conscientes de los riesgos asociados a las bebidas energéticas y no deben permitir que sus hijos las consuman.