queso Roquefort es deliciosa y decadente. Al igual que muchos alimentos decadentes, este queso es alta en calorías y grasa. En una onza de queso Roquefort, hay cerca de 105 calorías y 9 gramos de grasa. Alta en calorías y la ingesta de grasa puede conducir fácilmente a la obesidad. La obesidad, a su vez, puede conducir a una serie de problemas de salud, como la diabetes, enfermedades del corazón y la presión arterial alta. Al disfrutar de queso Roquefort, disfrutar con poca frecuencia y en pequeñas cantidades con el fin de reducir tanto el consumo de grasas y calorías.
Colesterol Alto

queso Roquefort, aparte de ser calórica, También tiene un alto contenido de grasa y colesterol. Hay alrededor de 26 mg de colesterol en una sola onza de queso Roquefort. Sólo alrededor de 200 a 400 mg de colesterol se deben comer por día. El colesterol se acumula en las arterias del cuerpo, dando lugar a un flujo sanguíneo restringido. Las personas con el colesterol alto enfermedad cara del corazón, así como problemas con las arterias en otras partes del cuerpo, como las que conducen al cerebro. Las personas con colesterol alto deben evitar el alto contenido de grasa, los alimentos ricos en colesterol, como el queso Roquefort, ni comer este queso en cantidades pequeñas solamente.
Mold

queso Roquefort es envejecido durante varios meses, hasta que se desarrolla un molde sabrosa inofensivo. Este molde da al queso su coloración azul, y es por eso que muchos tipos de quesos se llaman queso azul. Aunque este molde es inofensivo, otros tipos de moho pueden crecer rápidamente en un queso roquefort que se ha dejado demasiado tiempo, o no se ha almacenado correctamente. Estos otros moldes pueden hacer fácilmente una persona enferma. Debido a que el queso es ya moho, determinar si hay nuevo molde a veces puede ser un reto. Guarde este queso envueltos herméticamente en papel plástico. Guarde en el refrigerador por sólo entre tres y cuatro semanas.
Listeriosis

La listeriosis es una infección bacteriana grave. Es causada por la bacteria Listeria monocytogenes. Esta bacteria, que a menudo se encuentran en los animales o productos de origen animal, tales como quesos blandos, pueden provocar una enfermedad grave cuando se consume. Vómitos, irritaciones de la piel, letargo e ictericia son sólo unos pocos síntomas. Problemas de salud graves, como la meningitis y la septicemia pueden también resultar de esta bacteria. En las mujeres embarazadas, abortos involuntarios y partos mortinatos son comunes cuando listeriosis ha sido contratada. Aunque esta bacteria es relativamente rara en concentraciones suficientemente altas como para causar problemas de salud, y que por lo general se produce en productos pasteurizados, es importante mantener la cautela. Sólo comer frescas, quesos pasteurizados de los minoristas confiables. Evite los quesos blandos, como el Roquefort, si está embarazada.