¿Cómo se quita el exceso de sal del chile casero?

Utilice una patata:

Corta una papa cruda en rodajas gruesas y agrégalas al chile. Cocine el chile por 15 a 20 minutos más o hasta que las papas estén tiernas. La patata absorberá parte del exceso de sal. Retire las rodajas de papa antes de servir.

Agregar lácteos:

Intente agregar algunos productos lácteos como crema agria, crema espesa o yogur natural.

Aportan una textura rica y cremosa que puede ayudar a reducir la percepción de salinidad. Utilice este método con precaución ya que puede alterar el sabor del chile.

Utilice maicena o harina:

Mezcla una cucharada de maicena o harina con un poco de agua para crear una papilla. Incorpora gradualmente la mezcla al chile hirviendo hasta que espese un poco. Este método funciona absorbiendo parte del líquido y concentrando los sabores, reduciendo así el sabor salado en relación con el volumen total.

Agregue un edulcorante:

Una pequeña cantidad de dulzor natural puede ayudar a equilibrar el sabor salado. Considere agregar una cucharadita o dos de miel, azúcar morena o melaza. Estos edulcorantes mejorarán el perfil de sabor general del chile sin dominarlo. Sea discreto, ya que demasiada dulzura puede enmascarar otros sabores.

Sirva con acompañamientos sin sal:

Combine el chile con guarniciones relativamente suaves como arroz al vapor, pan de maíz o pan crujiente. Estos elementos contrastarán con el sabor salado del chile, lo que ayudará a equilibrar los sabores.

Recuerda que siempre es mejor añadir menos sal de la deseada inicialmente y ajustar poco a poco al gusto. Además, tenga en cuenta que algunos ingredientes, como productos enlatados, queso o salsa de soja, pueden contribuir al sabor salado del chile.