¿Cómo se le quita la sal a una salsa de tomate?

Hay algunas formas de reducir el sabor salado de una salsa de tomate:

1. Diluir la salsa con agua. Esta es la forma más fácil de reducir el sabor salado de una salsa, pero también la adelgazará. Para evitar esto, puedes cocinar la salsa a fuego lento después de agregar agua para reducirla nuevamente.

2. Agregue un ingrediente con almidón, como arroz o pasta. Agregar ingredientes con almidón ayudará a absorber parte de la sal de la salsa. Puedes agregar arroz o pasta cocidos directamente a la salsa, o puedes hacer una papilla mezclando una pequeña cantidad de arroz o pasta crudos con agua y luego agregándolos a la salsa.

3. Agregue un ingrediente ácido, como jugo de limón o vinagre. Los ingredientes ácidos pueden ayudar a equilibrar el sabor salado de una salsa. Puedes agregar unos chorritos de jugo de limón o vinagre directamente a la salsa, o puedes hacer una marinada rápida mezclando jugo de limón, vinagre y aceite de oliva y luego agregarlo a la salsa.

4. Agregue un ingrediente dulce, como azúcar o miel. Los ingredientes dulces pueden ayudar a contrarrestar el sabor salado de una salsa. Puedes agregar una pequeña cantidad de azúcar o miel directamente a la salsa, o puedes hacer un almíbar simple disolviendo azúcar o miel en agua y luego agregándolo a la salsa.

5. Utilice un sustituto de la sal. Si está intentando reducir su consumo de sal, puede utilizar un sustituto de la sal en lugar de la sal normal. Los sustitutos de la sal se elaboran con cloruro de potasio u otros minerales que pueden proporcionar un sabor salado sin sodio.

Si sigue estos consejos, podrá reducir fácilmente el sabor salado de su salsa de tomate y disfrutar de una comida deliciosa y sabrosa.