¿Las sopas realmente te calientan?

Sí, las sopas pueden ayudarte a entrar en calor. Cuando consumes una sopa caliente, el calor del líquido y los ingredientes se transfiere a tu cuerpo, elevando tu temperatura interna y haciéndote sentir más cálido. El vapor que sale de la sopa también puede ayudar a despejar las fosas nasales y aliviar la congestión, lo que puede contribuir aún más a una sensación de calidez y comodidad. Además, algunas sopas, como las que contienen ingredientes picantes como el chile o el jengibre, pueden estimular la circulación sanguínea y aumentar la actividad metabólica, lo que también puede provocar una sensación de calor.