¿Cómo se congelan las peras frescas?

Para congelar peras frescas, sigue estos pasos:

1. Prepara las peras. Lavar las peras y eliminar posibles magulladuras o imperfecciones. Pele las peras, descorazonelas y luego córtelas en rodajas o trozos.

2. Trate previamente las peras. Para evitar que las peras se pongan marrones, puedes tratarlas previamente con una solución de ácido ascórbico (vitamina C). Disuelva 1/4 de cucharadita de ácido ascórbico en 1 taza de agua. Remoje las rodajas de pera en la solución durante 5 minutos y luego escúrralas bien.

3. Congela las peras. Extienda las rodajas o trozos de pera en una bandeja para hornear y colóquelas en el congelador. Congele hasta que esté sólido, luego transfiera las peras a un recipiente apto para congelador. Etiquete el recipiente con la fecha y el contenido.

4. Consejos para congelar peras:

* Para ahorrar espacio, puedes congelar las rodajas o los trozos de pera en una sola capa sobre una bandeja para hornear antes de transferirlos a un recipiente apto para congelador.

* Para evitar quemaduras en el congelador, asegúrese de que el recipiente apto para el congelador sea hermético.

* Las peras congeladas durarán hasta 12 meses en el congelador.

Cuando esté listo para usar las peras congeladas, descongélelas durante la noche en el refrigerador o a temperatura ambiente durante varias horas. También puedes cocinar las peras mientras aún estén congeladas.