¿Cómo sabrías si los huevos de gallina que compró tu madre son frescos o no?

1. Comprueba la fecha de caducidad. Esta es la forma más obvia de saber si los huevos están frescos. La fecha de vencimiento suele estar impresa en la caja. Si los huevos han pasado su fecha de caducidad, no se deben comer.

2. Haz la prueba de flotación. Coloca los huevos en un recipiente con agua fría. Si los huevos se hunden hasta el fondo, están frescos. Si los huevos flotan hacia la superficie, son viejos y no se deben comer.

3. Huele los huevos. Los huevos frescos deben tener un olor ligeramente dulce. Si los huevos huelen mal, no se deben comer.

4. Rompe los huevos en un bol. La yema de un huevo fresco debe ser redonda y firme. La clara de un huevo fresco debe ser clara y viscosa. Si la yema está plana o líquida, o si la clara está turbia, los huevos no están frescos.

5. Cocine los huevos. Los huevos frescos se cocinarán rápida y uniformemente. Los huevos viejos pueden tardar más en cocinarse y es posible que no se cocinen de manera uniforme.

Si sigue estos consejos, podrá estar seguro de que está comiendo huevos frescos, seguros y nutritivos.