¿Por qué engrasar un molde para hornear?

Hay varias razones por las que es importante engrasar un molde para hornear antes de usarlo:

1. Para evitar que se pegue: Engrasar la lata crea una barrera entre la comida y la superficie metálica, evitando que la comida se pegue a la lata. Esto es especialmente importante para productos horneados delicados como pasteles, galletas y pasteles que pueden romperse o rasgarse fácilmente al sacarlos del molde.

2. Dorado uniforme: Un molde para hornear engrasado ayuda a asegurar un dorado uniforme de los productos horneados. Cuando el molde está engrasado, permite que el calor se distribuya uniformemente, evitando que la comida se queme en algunos puntos y quede poco cocida en otros.

3. Facilidad de eliminación: Engrasar el molde hace que sea más fácil sacar los productos horneados una vez que hayan terminado de cocinarse. La grasa actúa como lubricante, permitiendo que la comida se deslice fuera del molde sin romperse ni rasgarse.

4. Limpieza: Un molde para hornear engrasado es más fácil de limpiar después de su uso. La grasa evita que las partículas de comida se peguen al molde, lo que facilita su lavado y mantenimiento.

5. Prevención de la oxidación: Engrasar un molde para hornear puede ayudar a evitar que se forme óxido en la superficie del metal. El óxido puede afectar la apariencia y funcionalidad del estaño, y engrasarlo ayuda a proteger el metal de la humedad y la corrosión.

Es importante tener en cuenta que no todas las recetas para hornear requieren engrasar el molde. Algunas recetas, como los bizcochos, dependen de que la masa suba y se adhiera a los lados del molde para darle estructura, por lo que no es necesario engrasar el molde. Siga siempre las instrucciones específicas de la receta que esté utilizando para determinar si es necesario engrasar la lata.