Cuando enciendes la estufa y usas una cerilla, ¿qué proceso ocurre?

Combustión

Cuando enciendes una cerilla, estás iniciando una reacción química llamada combustión. La combustión es un proceso en el que un combustible (en este caso, la madera de la cerilla) reacciona con el oxígeno para producir calor y luz. Durante la combustión se producen los siguientes pasos:

1. Encendido: Cuando golpeas la cerilla contra una superficie rugosa, la fricción genera calor. Este calor hace que los químicos en la cabeza del fósforo se enciendan, produciendo una llama.

2. Combustible: La llama proporciona la energía necesaria para que la madera de la cerilla comience a arder. La madera está compuesta de celulosa, un carbohidrato complejo. Cuando la celulosa se calienta, se descompone en moléculas más pequeñas, como la glucosa y el agua. Luego, estas moléculas reaccionan con el oxígeno para producir calor y luz.

3. Oxígeno: El oxígeno es esencial para que se produzca la combustión. El aire que nos rodea contiene aproximadamente un 21% de oxígeno. Cuando la madera de la cerilla se quema, consume oxígeno del aire.

4. Productos: Los productos de la combustión incluyen calor, luz, dióxido de carbono y vapor de agua. El dióxido de carbono es un gas de efecto invernadero que contribuye al cambio climático, mientras que el vapor de agua es una parte natural de la atmósfera.

El proceso de combustión es esencial para muchas cosas, incluidas cocinar, calentar y transportar. Sin embargo, es importante recordar que la combustión también puede producir contaminantes nocivos, como monóxido de carbono y óxidos de nitrógeno. Estos contaminantes pueden contribuir al smog, la lluvia ácida y otros problemas ambientales.