Cuando derrites mantequilla en una sartén, ¿es un cambio físico el que libera energía?

Cuando la mantequilla se derrite en una sartén, sufre un cambio físico. Esto significa que la composición química de la mantequilla no cambia, pero sí sus propiedades físicas, como su textura y forma.

Cuando se calienta la mantequilla, la energía cinética de las moléculas aumenta, lo que hace que se muevan más rápido y se separen unas de otras. Esto hace que la mantequilla se derrita de sólido a líquido. La energía necesaria para derretir la mantequilla proviene de la fuente de calor, como la estufa o el microondas.

La fusión de la mantequilla es un proceso endotérmico, lo que significa que absorbe energía del entorno. Esta energía se utiliza para romper los enlaces entre las moléculas de mantequilla y convertirlas de sólido a líquido.

El proceso opuesto, la congelación, es un proceso exotérmico, lo que significa que libera energía al entorno. Esta energía se libera cuando las moléculas de mantequilla disminuyen su velocidad y se unen para formar un sólido.

En resumen, cuando la mantequilla se derrite en una sartén, sufre un cambio físico que absorbe energía del entorno.