¿Qué tan grueso puede ser un esqueje y aún así enraizar?

El grosor máximo de un esqueje que aún puede enraizar depende de la especie de planta y de las condiciones de enraizamiento. Como norma general, los esquejes deben tomarse de tallos jóvenes, sanos y no demasiado leñosos. El grosor ideal para la mayoría de las plantas es de entre 1/4 y 1/2 pulgada (0,6 a 1,3 cm). Es posible que los esquejes que son demasiado delgados no tengan suficientes reservas para favorecer el desarrollo de las raíces, mientras que los esquejes que son demasiado gruesos pueden resultar más difíciles para que la planta produzca raíces.

Algunas plantas, como las rosas y las uvas, se pueden propagar con éxito a partir de esquejes de hasta 2,5 cm (1 pulgada) de grosor. Sin embargo, estas plantas suelen requerir cuidados y atención especiales para garantizar que los esquejes enraícen correctamente.

Además del grosor del esqueje, otros factores que pueden afectar el éxito del enraizamiento incluyen el tipo de suelo o medio de enraizamiento utilizado, el contenido de humedad del medio, la temperatura y humedad del ambiente y la disponibilidad de luz. Si se proporcionan las condiciones adecuadas, es posible enraizar con éxito esquejes de una amplia variedad de plantas, independientemente de su grosor.