¿Por qué la savia de arce se recolecta en primavera y no en otoño?

En realidad, la savia de arce se puede recolectar tanto en primavera como en otoño, pero hay algunas razones por las que se hace más comúnmente en primavera:

1. Contenido de azúcar :Durante el invierno, los arces almacenan almidón en sus raíces y tronco. En primavera, cuando las temperaturas empiezan a subir, este almidón se convierte en azúcar. Como resultado, el contenido de azúcar de la savia de arce alcanza su punto máximo en la primavera, lo que la convierte en el momento ideal para la recolección.

2. Temperatura :La savia del arce solo fluye cuando las temperaturas están por encima del punto de congelación durante el día y bajo cero durante la noche. Esta fluctuación de temperatura provoca cambios de presión dentro del árbol, lo que obliga a la savia a subir a través del tronco y las ramas. En primavera, estas fluctuaciones de temperatura son más comunes, lo que crea las condiciones óptimas para la recolección de savia.

3. Brotación :Los arces comienzan a brotar y producir hojas en la primavera. Este proceso requiere una cantidad importante de energía y agua, lo que hace que aumente el flujo de savia. El aumento del flujo de savia mejora aún más la eficiencia y productividad de la recolección de savia.

4. Tradición y Exigencia :Históricamente, la producción de jarabe de arce se ha asociado con la primavera como símbolo de renovación y la llegada de un clima más cálido. La temporada alta de producción de jarabe en muchas regiones coincide con los meses de primavera debido a la combinación de condiciones climáticas favorables y tradiciones culturales.

Si bien es técnicamente posible recolectar savia de arce en otoño, el menor contenido de azúcar y las fluctuaciones de temperatura menos constantes generalmente lo hacen menos práctico en comparación con la recolección de primavera.