¿Los contenedores de almacenamiento de alimentos Rubbermaid están fabricados con plástico seguro?

Los contenedores de almacenamiento de alimentos de Rubbermaid generalmente están fabricados con materiales plásticos seguros aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE. UU. (FDA) para el contacto con alimentos. Rubbermaid utiliza varios tipos de resinas plásticas en sus contenedores de almacenamiento de alimentos, incluidos polipropileno (PP), tereftalato de polietileno (PET) y Tritan.

El polipropileno (PP) es un material plástico ampliamente utilizado y aprobado por la FDA para el almacenamiento de alimentos. Se considera seguro y no libera sustancias nocivas a los alimentos. Los recipientes de polipropileno son aptos para microondas y pueden soportar altas temperaturas sin liberar productos químicos tóxicos.

El tereftalato de polietileno (PET) es otro plástico aprobado por la FDA que se utiliza en los contenedores de almacenamiento de alimentos Rubbermaid. El PET se utiliza habitualmente para fabricar botellas y recipientes de plástico transparente. Se considera seguro para el almacenamiento de alimentos y no presenta ningún riesgo significativo para la salud.

Tritan es un material plástico patentado desarrollado por Eastman Chemical Company. No contiene BPA y no contiene productos químicos nocivos como ftalatos o bisfenol A (BPA). Los contenedores Tritan son muy duraderos, resistentes a roturas y aptos para microondas. También son aptos para lavavajillas y soportan altas temperaturas sin liberar sustancias nocivas.

Rubbermaid también ofrece recipientes para almacenar alimentos hechos de vidrio, que es un material naturalmente seguro e inerte. Los recipientes de vidrio no filtran ningún químico en los alimentos y pueden usarse para almacenar una amplia variedad de alimentos.

En general, los recipientes de almacenamiento de alimentos de Rubbermaid generalmente están fabricados con materiales plásticos seguros aprobados por la FDA para el contacto con alimentos. Están diseñados para cumplir con estrictos estándares de seguridad y no contienen productos químicos nocivos que puedan suponer un riesgo para la salud humana.