¿Cómo describirías una mousse de chocolate elaborada con calidad?

Una mousse de chocolate de calidad debe tener una textura rica y aterciopelada que se derrita en la boca. Debe ser ligero y aireado, pero aun así tener una presencia sustancial en el paladar. El sabor del chocolate debe ser profundo y complejo, sin regusto granulado o calcáreo. La mousse debe quedar perfectamente equilibrada, con la cantidad justa de dulzor y amargor. También debe tener un acabado suave y brillante y un delicado aroma a chocolate. Además, la mousse debe mantener bien su forma cuando se sirve y no perder su estructura demasiado rápido.