¿Es seguro beber un pequeño porcentaje de hidróxido de sodio?

El hidróxido de sodio (NaOH), también conocido como lejía o sosa cáustica, es un álcali altamente corrosivo que puede provocar quemaduras graves y daños en los tejidos si se ingiere. Incluso pequeñas cantidades pueden ser peligrosas y provocar problemas de salud graves, como perforación esofágica, hemorragia interna e incluso la muerte.

El nivel de toxicidad del hidróxido de sodio depende de la concentración de la solución y de la cantidad ingerida. En términos generales, cuanto mayor sea la concentración y mayor la cantidad ingerida, más graves serán los efectos sobre la salud.

Incluso pequeñas cantidades de hidróxido de sodio pueden causar irritación y daño a la boca, la garganta y el esófago. En algunos casos, también puede provocar náuseas, vómitos y dolor abdominal. En casos más graves, puede provocar dificultad para respirar, presión arterial baja y convulsiones.

Es importante buscar atención médica de inmediato si ha ingerido cualquier cantidad de hidróxido de sodio. Cuanto antes reciba el tratamiento, mayores serán las posibilidades de minimizar los efectos sobre la salud.