¿Por qué blanqueas el pollo?

Hay varias razones por las que se escalda el pollo antes de cocinarlo:

1. Limpieza: El escaldado ayuda a eliminar las impurezas, la sangre y las partículas sueltas de la superficie del pollo, lo que da como resultado un producto final más limpio y puro.

2. Mejora de la textura: El escaldado reafirma la superficie del pollo, dándole una textura ligeramente crujiente cuando se cocina. Esto es particularmente beneficioso para platos como salteados y ensaladas.

3. Preservación del color: El escaldado cocina momentáneamente el pollo y fija su color, evitando que se vuelva gris o opaco durante la cocción posterior.

4. Reducir el tiempo de cocción: Cocinar parcialmente el pollo mediante escaldado reduce el tiempo total de cocción requerido para el plato, haciéndolo más eficiente y conveniente.

5. Sabores de lanzamiento: El escaldado ayuda a extraer y liberar algunos sabores del pollo, lo que da como resultado un sabor más intenso en el plato final.

6. Eliminar el exceso de grasa: Blanquearlo puede ayudar a eliminar parte del exceso de grasa del pollo, lo que da como resultado un plato más saludable.

7. Comodidad: El pollo blanqueado se puede guardar fácilmente en el refrigerador o el congelador, lo que lo hace conveniente para usarlo más adelante en varias recetas.

8. Consistencia: El escaldado garantiza resultados de cocción consistentes, especialmente cuando se preparan grandes cantidades de pollo para platos que requieren textura y color uniformes.

Es importante tener en cuenta que escaldar no debe confundirse con cocinar completamente el pollo. El escaldado es un proceso breve que cocina parcialmente el pollo para mejorar su textura, color y sabor, mientras mantiene su estado crudo para cocinarlo más.