¿Qué es el pollo a la florentina?

Pollo a la florentina es un plato clásico francés-italiano elaborado con pechugas de pollo, espinacas y una salsa cremosa. Por lo general, se sirve sobre pasta o arroz.

Historia:

Se cree que el pollo a la florentina se originó en la región italiana de Toscana, donde se lo conoce como "Pollo alla Fiorentina". El plato ganó popularidad en Francia en el siglo XIX, donde fue adaptado y perfeccionado por los chefs franceses.

Ingredientes:

Los ingredientes principales del pollo a la florentina incluyen:

- Pechugas de pollo deshuesadas y sin piel

- Espinacas frescas

- Ajo

- Crema espesa

- Queso parmesano rallado

- aceite de oliva

- Sal y pimienta

- Se pueden añadir ingredientes adicionales, como champiñones, tomates secos o corazones de alcachofa, para realzar el sabor y la variedad del plato.

Preparación:

1. Pollo: Las pechugas de pollo se sazonan con sal y pimienta y luego se saltean en aceite de oliva hasta que estén doradas por ambos lados. Luego se dejan reposar.

2. Espinacas: Las espinacas frescas se saltean en aceite de oliva con ajo hasta que se ablanden y estén tiernas.

3. Salsa: Se agrega crema espesa a las espinacas y se lleva a fuego lento. Se agrega gradualmente queso parmesano rallado para espesar la salsa y crear una consistencia cremosa. La salsa se sazona con sal y pimienta al gusto.

4. Montaje: Se vuelven a colocar las pechugas de pollo en la sartén con las espinacas y la salsa. El plato se cuece a fuego lento durante unos minutos para permitir que los sabores se mezclen y el pollo absorba la salsa.

5. Servicio: El pollo a la florentina se sirve tradicionalmente sobre pasta cocida, como linguini o fettuccine. Sin embargo, también se puede servir sobre arroz, puré de papas u otros acompañamientos.

Variaciones:

Existen varias variaciones de pollo a la florentina, que incluyen:

- Pollo a la florentina con champiñones: Se agregan champiñones salteados a las espinacas y la salsa para darle un toque terroso y sabroso.

- Pollo a la florentina con tomates secos: Los tomates secados al sol añaden un sabor dulce y picante al plato.

- Pollo a la florentina con corazones de alcachofa: Los corazones de alcachofa aportan un sabor ligeramente salado y a nuez que combina bien con el pollo y las espinacas.

- Pollo a la florentina con salsa pesto: En lugar de una salsa cremosa, se puede usar salsa pesto hecha con albahaca, ajo, aceite de oliva y piñones para cubrir el pollo y las espinacas.

Presentación:

El pollo a la florentina se puede presentar de varias formas para que sea visualmente atractivo. Por lo general, se sirve en platos con las pechugas de pollo sobre una cama de espinacas y salsa, cubiertas con queso parmesano rallado adicional y una pizca de hierbas frescas, como albahaca o perejil.

Valor nutricional:

El pollo a la florentina generalmente se considera una comida bien equilibrada, ya que combina proteínas (del pollo), vitaminas y minerales (de las espinacas) y grasas saludables (del aceite de oliva y del queso parmesano). Sin embargo, el valor nutricional puede variar según los ingredientes utilizados, como el tipo de pasta o las guarniciones que se sirven con el plato.